Se llama Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) a los procedimientos quirúrgicos electivos en los que el paciente recibe el alta médica el mismo día en que ingresa al hospital o clínica.

Mediante este modelo de atención, muy utilizado en los países desarrollados, el paciente ingresa generalmente en la mañana, se realiza la cirugía indicada y antes que termine el día, ya está de vuelta en su casa para continuar allí su postoperatorio.

Hernia abdominal y cirugía  ambulatoria

El doctor Rodrigo Ávila, cirujano digestivo de Clínica Dávila, indica que la mayoría de los pacientes que sufren una hernia abdominal “pueden someterse a cirugía mayor ambulatoria”.

Quienes tienen una hernia umbilical (una de las más frecuentes) también pueden someterse a este tipo de intervención siempre que sea programada (no de urgencia).

“Esto depende tanto del tipo de intervención como de las características del paciente”, añade el especialista.

Una hernia umbilical, como su nombre lo indica, es una hernia que aparece en la zona cercana al ombligo.

“Se trata de un defecto de la pared abdominal en la región umbilical, en el que se abre un espacio entre los músculos a través del cual puede o no salir alguna víscera y que se manifiesta como una masa palpable, que puede ser dolorosa”, explica el especialista.

En general, los pacientes que se someten a una cirugía ambulatoria para reparar una hernia abdominal, “deben tener buen estado de salud o tener sus enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión arterial y otras, compensadas”.

También es importante que cuenten con el apoyo familiar domiciliario necesario durante el postoperatorio en casa.

Las hernias umbilicales pueden ocurrir en cualquier persona, pero son más frecuentes en fumadores, tosedores crónicos, obesos o aquellos que realicen cualquier actividad física o enfermedad que aumente la presión del abdomen, incluso el embarazo.

Los recién nacidos y niños pequeños también pueden tener hernias umbilicales, aunque en la mayoría de esos casos se trata de un defecto en la pared abdominal con el que nacen, pero con el paso del tiempo, se cierra y la hernia desaparece.

Malla para reparar

Como todas las hernias abdominales, la indicación de tratamiento para la hernia umbilical es la cirugía.

Si no se realiza la cirugía existe el riesgo que la parte del intestino o grasa que logre pasar por la abertura de la pared abdominal se quede atrapada allí, se atasque y pueda incluso quedar sin irrigación.

La descripción anterior corresponde a una urgencia, por lo que, en este caso no se podrá practicar una cirugía ambulatoria. Sin embargo, al igual que todas las hernias siempre se deben operar.

“En la cirugía, lo que se hace es devol ver el contenido (que se sale a través del orificio) al abdomen, cerrar el defecto herniario y reforzarlo con una malla”, dice el cirujano de Clínica Dávila.

Durante la operación se puede utilizar anestesia general o espinal. La cicatriz que queda tras la cirugía, depende –generalmente- del tamaño de la hernia, pero en la mayoría de los casos, la incisión es pequeña, de unos pocos centímetros.

En la actualidad, las cirugías hernias utilizan una malla de reforzamiento que reduce la posibilidad de que vuelva a aparecer la hernia en ese lugar donde los músculos abdominales ya están debilitados.

Cuando este procedimiento se realiza mediante una cirugía ambulatoria, el tiempo de estadía y sobre todo de recuperación se acorta en comparación con una cirugía tradicional que requiere un par de días de hospitalización.

El cirujano de Clínica Dávila, dice que las principales ventajas de la cirugía ambulatoria son:

  • Disminuye la posibilidad de una infección intrahospitalaria.
  • Reduce los costos.
  • Implica un menor estrés para el paciente, una recuperación más rápida y también una más rápida incorporación a las labores habituales.
12861151-7
30101005