El pellizcamiento de cadera se produce por un contacto anormal entre el fémur y el acetábulo. Entre ambos huesos, se encuentra el labrum, estructura con terminaciones sensitivas que causa dolor a las personas en sus actividades cotidianas cuando el fémur y el acetábulo chocan.

Síntomas y causas del pellizcamiento de cadera

Según el doctor Claudio Rojas, traumatólogo especialista en cadera de Clínica Dávila, se trata de un dolor que no aparece en reposo, sino que más bien es gatillado por diferentes movimientos, como cuando los pacientes flectan la cadera, cruzan las piernas, se bajan del auto o hacen determinados deportes como fútbol, artes marciales y danza. Asimismo, agrega que el dolor de cadera se presenta como una molestia en la ingle.

Regularmente, estas alteraciones óseas vienen desde el nacimiento de las personas, sin embargo, según explica el doctor Rojas, hay estudios que demuestran que la morfología de los huesos podría ir modificándose por algunas actividades que realizan los pacientes a lo largo de su vida, como los deportes mencionados anteriormente, lo que provoca una modificación de la forma, causando el dolor en el labrum.

Tipos de pellizcamiento

Los pellizcamientos de cadera que se presentan con más frecuencia son dos: el de tipo CAM y el de tipo pincer.

El de tipo CAM afecta principalmente a hombres jóvenes, de entre 20 y 45 años, y se caracteriza porque la alteración de la forma está a nivel del fémur.

Por su parte, el de tipo pincer, se distingue del CAM porque la alteración está a nivel del acetábulo y compromete especialmente a mujeres de entre 30 y 50 años.

Diagnóstico

El diagnóstico de esta patología se hace de acuerdo a la historia clínica del paciente y la imagenología. El especialista a cargo debe complementar los síntomas con una radiografía que muestre las alteraciones óseas y una resonancia magnética que evidencie la lesión en el labrum.

Cuando no se logra compatibilizar la historia clínica con las imágenes, o las imágenes no son del todo concluyentes, el médico puede solicitar un test de lidocaína, que consiste en poner un anestésico local en el labrum del paciente y si el dolor desaparece por completo, se confirmaría el pellizcamiento.

Tratamiento para el pellizcamiento

Existen dos tipos de tratamiento para eliminar el dolor que causa el pellizcamiento.

En primer lugar, se realiza un tratamiento médico, el que implica tomar analgésicos, suprimir actividades deportivas o físicas que están causando el dolor y terapia kinesiológica por tres a seis meses, dependiendo del caso.

Si estas medidas fracasan a pesar de la constancia del paciente, se puede recurrir a una segunda alternativa, la quirúrgica.

Inicialmente, la cirugía se hacía a través de una luxación controlada, es decir, se hacía una incisión grande y mediante una técnica especial se luxaba la articulación, eliminando las deformidades y arreglado el problema que había en el labrum.

Sin embargo, en la actualidad, lo que se hace es una artroscopia de cadera. Esto quiere decir que, a través de una técnica mínimamente invasiva se corrigen las alteraciones del paciente. Utilizando anestesia raquídea, el cirujano realiza de dos a cuatro incisiones de un centímetro por los que introduce cámaras e instrumentos de trabajo para reparar el labrum.

Una vez realizada la cirugía, el paciente tarda alrededor de dos meses en volver a trabajar y hacer una vida normal. Generalmente al día siguiente de la intervención los pacientes están caminando con bastones. Al primer mes se retira el primero y al cabo del segundo, ya puede moverse sin apoyo. Sin embargo, el reposo deportivo usualmente es indicado por un periodo de seis meses.