Un niño es considerado prematuro cuando nace antes de las 37 semanas de gestación. Por su parte, el prematuro extremo es aquel niño que nace antes de las 32 semanas o con un peso inferior a 1500gr. Cada vez nacen más prematuros en el mundo y también en Chile. En nuestro país nacen aproximadamente 18.000 prematuros al año, de estos casi 1500 son prematuros extremos.  La prematurez es la principal causa de mortalidad neonatal y la segunda causa de mortalidad infantil en Chile.   La sobrevida de los prematuros extremos en Chile es de más de 75% y en Clínica Dávila es de más de 80%. Sin embargo aproximadamente un tercio de estos bebés sobreviven con alguna secuela.

Secuelas en niños prematuros

Una de las secuelas de la prematurez extrema es la displasia broncopulmonar que es un problema respiratorio crónico en que el pulmón no completó su maduración y desarrollo normal, por lo que pueden requerir oxígeno por períodos prolongados, incluso al momento de ser dados de alta. Los prematuros extremos también pueden sufrir secuelas neurológicas crónicas, que se pueden manifestar como parálisis cerebral en los casos más graves, pero también con problemas motores, de lenguaje, cognitivos, conductuales y de aprendizaje. Es de vital importancia que estos bebés nazcan en un centro neonatal especializado ya que la atención en los primeros minutos y horas de vida son cruciales para su sobrevida. Clínica Dávila cuenta con una unidad neonatal  de alta complejidad atendida por un grupo de médicos especialistas y profesionales no médicos, como matronas, kinesiólogos, fonoaudiólogoas, terapistas de gran experiencia  y conocimiento en el cuidado y atención del prematuro.

Cuidados neonatales

La vivencia de los padres y de la familia de un bebé prematuro puede ser muy dura. Estos niños quedan hospitalizado en la unidad neonatal un promedio de 60 días, pero pueden estar incluso cinco o seis meses.  Es por esto que contar con un grupo de profesionales especialistas en prematurez es clave para dar el apoyo necesario a los padres durante toda su estadía. La prematurez se ha transformado en un gran desafío, tanto para disminuir su incidencia, enfocado en adecuados cuidados prenatales, como para disminuir las secuelas con adecuados cuidados neonatales. Los cuidados neonatales orientados en el neurodesarrollo son una práctica que ha demostrado ser beneficiosa para la evolución a corto y largo plazo de estos bebés.

Los padres

Es así como la participación de los padres en el cuidado de sus bebés es muy importante.   Los padres serán cruciales en este largo proceso de crecimiento y recuperación.  Actividades como el aporte de leche materna, el contacto piel a piel en técnica de canguro,  la contención y la voz de su madre o padre han demostrado ser beneficiosas para el mejor crecimiento de estos bebés. La leche materna es crucial en el cuidado neonatal, puesto que ha demostrado:
  • Disminuir las infecciones en el prematuro.
  • Prevenir complicaciones gastrointestinales como la enterocolitis necrotizante.
  • Mejorar la inmunidad.
  • Mejorar el desarrollo pulmonar, cerebral y de la visión.
Es importante que las madres de bebés prematuros puedan iniciar precozmente la extracción de calostro y luego de leche materna, para poder ofrecerla a los bebés. Primero por una sonda que va a su cavidad gástrica y luego cuando sean más grandes directo al pecho. La Unidad de Paciente Critico Neonatal de Clínica Dávila está especialmente preocupada en favorecer la lactancia materna. Es por lo anterior que, cuenta con un lactario, equipado especialmente para que éstas mamás puedan extraer su leche y dejarla a su bebé. Las madres también tienen la posibilidad de una vez ser dadas de alta, traer su leche desde el hogar.  Además, las madres reciben la educación y el apoyo necesario para una exitosa lactancia materna durante toda su estadía. La unidad neonatal de Clínica Dávila pertenece a la Red Neocosur que es una base de datos neonatales de más de 30 hospitales y clínicas de Sudamérica. Clínica Dávila colabora con los datos neonatales de su unidad con el objetivo de mantener una monitorización de los principales resultados de los recién nacidos prematuros de la Unidad de Neonatología y compararnos con otros centros de la región. De esta manera podemos vigilar y mejorar nuestras prácticas clínicas para dar una atención neonatal de alta calidad.