La enuresis es una patología que implica que los niños se orinan mientras duermen, lo que puede ocurrir en la noche o en el día indistintamente. De acuerdo a la doctora Gabriela Retamal, uróloga infantil de Clínica Dávila, esto puede ocurrir en la noche cuando están dormidos o en el día cuando toman siesta.

Asimismo, la especialista explica que la acción de orinarse mientras duermen es considerada una patología cuando sigue ocurriendo después de los cinco años. Antes de esto, es considerado como parte del proceso normal de desarrollo del menor.

Además, indica que hay muchas definiciones para hablar de enuresis, pero una de las más aceptadas es cuando un niño presenta más de cuatro episodios al mes.

Causas de la enuresis

La enuresis se asocia a diferentes causas entre las cuales se encuentran: factores genéticos, vesicales y patologías de obstrucción de la vía aérea, explica la doctora Retamal y agrega que, se ha demostrado que los trastornos del sueño pueden influir en la aparición de esta patología.

Así, pacientes que tienen un sueño muy profundo, se caracterizan por ser incapaces de despertar frente a estímulos como tener la vejiga llena. De hecho, se trata de pacientes que, en general, no se despiertan cuando los llaman por la noche, cuando hay un temblor o si prenden la luz del lugar en el que se encuentran durmiendo. Asimismo, tampoco se despiertan frente a estímulos internos como pueden ser un dolor abdominal o la vejiga llena antes descrita.

A todo lo anterior, se agrega que es una enfermedad que se presenta más frecuentemente en niños que en niñas.

Diagnóstico y tratamiento para la enuresis

Para diagnosticar a un paciente con enuresis, en general, se considera la historia clínica, es decir, lo que los papás del menor cuentan en la consulta, y la edad del paciente.

Por otro lado, la uróloga infantil de Clínica Dávila, confiesa que, habitualmente se trata de una condición que puede pasar sola cuando no tiene otros factores de los descritos (sin patología vesical, sin patología de obstrucción de vía aérea) y que según la paciencia de la familia puede sólo ser observada. También hace el alcance de que existen otros elementos como uso de alarmas para despertar al niño si moja su ropa interior mientras duerme e intentar terminar de orinar en el baño, lo cual no siempre resulta.

También existe la posibilidad de utilizar fármacos hormonales, puesto que algunos de estos pacientes no producen un adecuado nivel de una hormona durante la noche. Sin embargo, esta alternativa se utiliza sólo en casos seleccionados.

Cuando se establecen trastornos asociados, deben tratarse en forma dirigida, como, por ejemplo, una disfunción de la vejiga que favorezca la enuresis.

Con todo lo descrito, es importante hacer un llamado a la calma a los pacientes, ya que solo el 1% de la población mantiene esta condición a los 15 años.

Recomendaciones

Finalmente, la experta entrega una serie de recomendaciones a los padres:

  • Tranquilidad, es una patología que siempre se pasa.
  • Si afecta demasiado al niño o a la familia, hacer terapia.
  • Consultar a un especialista para descartar patologías vesicales asociadas, alteraciones en las amígdalas, trastornos del sueño o psicológicos.
  • Apoyar al niño y no culparlo de algo que es completamente involuntario.