Las hemorroides son plexos venosos que se encuentran en el canal anal y que se encargan de la continencia fina. Cuando estos se corren de su lugar original, ocurre la denominada enfermedad hemorroidal.

Esto ocurre por causas muy variadas entre las cuales se encuentran el exceso de fuerza en la maniobra de Valsalva y quedarse sentado en el inodoro por un tiempo excesivo, sin tener necesidad.  Además, es frecuente en mujeres embarazadas, puesto que, cuando tienen a su bebé se comprime la vena cava, lo que altera el retorno venoso y produce la enfermedad.

Tipos de enfermedad hemorroidal

La enfermedad hemorroidal es una patología que se clasifica en dos tipos: interna y externa, comenta el doctor Rodrigo Azolas, coloproctólogo de Clínica Dávila.

A su vez, la enfermedad hemorroidal interna, se subdivide en grado 1, grado 2, grado 3 y grado 4.

Cuando un paciente padece de enfermedad hemorroidal interna grado 1, notan que sangran con sus deposiciones. Por otro lado, la enfermedad hemorroidal está en grado 2 cuando, además de sangrar, el paciente asegura que las hemorroides salen, pero se devuelven solas. Cuando la enfermedad está en grado 3, se suma al sangramiento que las hemorroides salen, pero no se devuelven solas, el paciente debe asistirse a sí mismo. Finalmente, se habla de un grado 4, cuando las hemorroides están prolapsadas, por lo que se quedan fuera. A esto se denomina prolapso hemorroidal, explica el especialista.

Por su parte, los síntomas de la enfermedad hemorroidal externa consisten en sensación de dolor en el trasero e hinchazón de un bulto en el mismo. Lo anterior ocurre, porque se trombosan las hemorroides externas.

Tratamientos para la enfermedad hemorroidal

El diagnóstico de esta patología consiste básicamente en un examen físico en el que el especialista debe mirar a través de un instrumento denominado anoscopio para identificar la enfermedad. Cuando los pacientes son mayores de 40 a 45 años, se agrega una colonoscopía para descartar otras patologías.

Los tratamientos para la enfermedad hemorroidal van a variar de acuerdo al tipo que presente cada paciente.

El doctor Azolas, explica que cuando se trata de una enfermedad hemorroidal interna grado 1 o 2, usualmente se dan medidas higiénicas que consisten en consumir mucha fibra, lavarse después de ir al baño, sentarse en agua tibia a caliente al menos dos veces al día y en algunos casos, uso de supositorios.

Por otro lado, el coloproctólogo de Clínica Dávila asegura que cuando la enfermedad hemorroidal está en un grado 3 o 4, es decir, prolapsada, hay que operar a los pacientes.

Para esto existen dos técnicas, la hemorroidopexia o PPH y la hemorroidectomía.

La hemorroidopexia consiste en utilizar una sutura mecánica para hacer una especie de jareta para que las hemorroides suban y se mantengan en su lugar. El problema de esta intervención es que, con el paso de los años tienden a caerse de nuevo.

Mientras que la hemorroidectomía, es un procedimiento mucho más doloroso, pero que promete acabar con el problema definitivamente, de acuerdo a lo comentado por el experto. La hemorroidectomía básicamente consiste en sacar las hemorroides.

Asimismo, el médico confiesa que cuando se trata de enfermedad hemorroidal externa aguda, es decir, el paciente llega con mucho dolor, se abre y se le sacan los coágulos, en caso contrario, se deja tratamiento hasta que los coágulos se reabsorban.

Finalmente, el especialista recalca que es de suma relevancia consultar ante cualquier sangramiento, ya que éste podría estar siendo causado por algo más que una enfermedad hemorroidal.