La radiación ultravioleta (UV) proveniente del sol, es reconocida como uno de los factores de riesgo de sufrir cáncer de piel, principalmente cuando esta exposición es excesiva. Este tipo de radiación es invisible a nuestros ojos, característica que sólo se descubrió en el siglo XIX.

Los rayos del sol son capaces de traspasar las capas de la atmósfera terrestre, las nubes y hasta los vidrios y ventanas, por lo que el llamado es a protegerse especialmente en verano, no importa si está despejado o nublado.

La doctora Daniela Saavedra, jefa del departamento de Dermatología de Clínica Dávila, explica que el sol y la radiación ultravioleta que emite, tiene efectos a corto y largo plazo en la salud de las personas. “A corto plazo, ahora en verano, el principal efecto son las quemaduras solares. Las personas se ponen rojas y en quienes son más blancas, pueden aparecer ampollas y eso es una insolación. En el corto plazo se pueden sentir muy mal, tener dolor, favoreciendo la aparición de cáncer de piel en el largo plazo”, señala.

La especialista advierte que aunque esté nublado, la radiación solar pasa igual a través de las nubes, por lo tanto en invierno y verano se debe aplicar protección solar y vestir ropa adecuada.

Según la Sociedad Chilena de Dermatología, cada año mueren en Chile 237 personas por cáncer a la piel. La cifra viene al alza. Entre 2010 y 2015, hubo un aumento de casos de cáncer cercano al 20%. Este incremento se registró principalmente en personas mayores. Por regiones, la que tiene más alta tasa de prevalencia es Antofagasta. Por su posición geográfica, toda la zona norte del país es la que más radiación recibe.

De los rayos UV, los llamados UVB son aquellos rayos que alcanzan la superficie de la piel y la oscurecen, causando quemaduras y envejecimiento anticipado. Los rayos UVA pueden penetrar a capas más profundas de la piel y causar cáncer.

Desde el año 2006, rige en Chile la Ley 20.006, una norma que obliga a las instituciones y empresas a prevenir la radiación UV en los trabajos y entregar todos los elementos necesarios para ello.

Si tienes alguna duda respecto del tipo de piel, la protección adecuada para ella o presentas algún lunar o mancha en la piel, pide hora con alguno de nuestros especialistas. La prevención y el diagnóstico son clave.