El accidente cerebrovascular, también conocido como ACV, constituye la principal causa de muerte en Chile y la segunda a nivel mundial.

Un ACV ocurre cuando hay hemorragia cerebral, que es cuando un vaso sanguíneo se rompe, causando sangrado en el cerebro. También existe cuando se produce un infarto cerebral, es decir, cuando una vena se cierra, lo que genera que se detenga el flujo de sangre que va hacia el cerebro. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) cada año, cerca de 15 millones de personas sufren de accidentes cerebrovasculares, de los cuales 5 millones fallecen y otros 5 quedan discapacitados.

Afecta a todas las edades pero suele ser más recurrente en mayores de 50 años. Los factores de riesgo son la presión arterial alta, hipertensión, diabetes, colesterol alto, sedentarismo, alcoholismo, drogas, entre otros factores relacionados a hábitos poco saludables.

¿Cuáles son sus síntomas?

  • Dolor de cabeza severa, sin causa alguna
  • Problemas para caminar y mareos repentinos
  • Confusión y problemas para hablar
  • Adormecimiento o parálisis de la cara, brazo y/o pierna

Ante cualquier sospecha, se requiere atención médica inmediata, para que las neuronas no dejen de recibir nutrientes esenciales y mueran, lo que puede generar daños irreversibles incluso la muerte. Por lo que mientras antes se trate, más posibilidades hay de aminorar las consecuencias, afirma el Dr. Jorge Villacura, neurólogo de Clínica Dávila Recoleta.

¿Cómo prevenir un ACV?

Controlar los factores de riesgo cardiovascular, como lo es la diabetes, hipertensión, obesidad, sedentarismo, colesterol alto, alto consumo de bebidas energéticas y alcohol, entre otras. 

Dávila cuenta con la Unidad de Tratamiento del Accidente Cerebrovascular (UTAC) la que está conformada por un equipo especializado en el estudio, tratamiento y rehabilitación de esta enfermedad.