Según la Organización Mundial de la Salud, unas 50 millones de personas tienen este trastorno en el mundo, haciendo de esta patología una de las enfermedades neurológicas más comunes a nivel global.

La epilepsia es una enfermedad crónica del cerebro en la que el paciente presenta una predisposición para generar crisis recurrentes, las que pueden manifestarse de forma distinta según el tipo de epilepsia. Las crisis se producen por descargas eléctricas sincronizadas y excesivas de las neuronas de la corteza cerebral. Esto causa que la persona presente sensaciones (denominadas auras) o comportamientos anormales como confusión, episodios de ausencia, rigidez en los músculos, movimientos espasmódicos incontrolables de brazos y piernas y, en ciertos casos, pérdida de conocimiento o desconexión del medio.

Recomendaciones cuando se presencia una crisis epiléptica:

  • Mantener la calma.
  • Evitar que la persona se golpee con objetos, si cae de manera brusca intentar sostenerlo y alejar objetos con los que se pueda golpear.
  • Colocar algo blando bajo su cabeza si es posible, pero nunca colocar nada dentro de la boca del paciente
  • Dirigirse al paciente con un lenguaje calmado.
  • Ayudarlo a respirar, ponerlo sobre un costado sirve para despejar boca y nariz, no se requiere de reanimación cardiorrespiratoria.
  • Observar atentamente, de esta manera será posible relatar el episodio en detalle a un doctor, lo que será clave para un buen diagnóstico y, por ende, un buen tratamiento. En lo posible tomar el tiempo de la crisis.

La Dra. Anna Milan, neuróloga de Clínica Dávila, asegura: “En la mayoría de casos la epilepsia se trata con fármacos antiepilépticos. Se estima que un 70% de los pacientes con tratamiento pueden mantenerse libres de crisis. Sin embargo, un tercio de ellos seguirá presentándolas, incluso trás haber intentado tratamiento médico con dos o más fármacos anti crisis a dosis máximas, lo que se denomina epilepsia refractaria”.

¿Qué es la cirugía de epilepsia?

Es una intervención quirúrgica del cerebro destinada a detener o reducir la frecuencia y severidad de crisis en pacientes con epilepsia focal refractaria, es decir, cuando dos o más medicamentos ya no controlan sus crisis. Hay distintos tipos de procedimientos que incluyen:

  • Remoción de una parte del tejido cerebral o lesión epileptógena.
  • Intervenciones de desconexión para detener la propagación de las crisis.
  • Técnica de láser o “marcapasos” para bloquear o interrumpir las crisis.

Como todo proceso quirúrgico, en primer lugar, se evalúa al paciente por un equipo multidisciplinario para determinar si es apto o no para la cirugía, analizando todo su historial médico y los beneficios para mejorar su calidad de vida. La Unidad de Neurofisiología, Epilepsia y Sueño de Clínica Dávila Recoleta está integrada por un equipo de especialistas entrenado en el estudio, diagnóstico y tratamiento de la epilepsia. 

Fecha de publicación: 17/11/2022