En Clínica Dávila contamos con una Unidad especializada para garantizar una mejor recuperación quirúrgica para los pacientes con patologías cardíacas. 

Una cirugía cardíaca mínimamente invasiva consiste en ejecutar un procedimiento al corazón, a través de pequeñas incisiones en lugar de una operación abierta.

“Se trata de realizar un pequeño corte de aproximadamente cinco centímetros en el costado del pecho, por donde se realiza la operación y pequeñas incisiones en las se introducen una pequeña cámara  de alta definición e instrumentos especiales, que facilitan la operación”, señala el Dr. Andrés Kursbaum, cardiocirujano de Dávila.

Al igual que en una cirugía convencional, se utiliza una máquina de circulación extracorpórea que se conecta al paciente, para suplantar la función del corazón y los pulmones durante el procedimiento para que continúe el bombeo y circulación de la sangre .

Las patologías para las que se opta por esta técnica son:

  • Reemplazo valvular aórtico
  • Reemplazo o reparación de válvula mitral
  • Reemplazo o reparación de válvula tricúspide
  • Cierre de defectos cardíacos como comunicación interauricular
  • Cirugía para la arritmia
  • Resección de tumores.

Beneficios de la cardiocirugía mínimamente invasiva:  

“En este tipo de operaciones, se puede acceder al corazón sin necesidad de cortar ningún hueso, lo que se significa, en muchos casos, menor dolor, recuperación más rápida, una estadía hospitalaria más corta, menos transfusiones de sangre y menor impacto estético en el paciente, ya que las cicatrices son más pequeñas y en lugares menos visibles”, asegura el especialista.

Además, si no existen complicaciones, el paciente podrá retomar sus actividades diarias en dos o tres semanas, mejorando así su calidad de vida. 

Conoce aquí más sobre las patologías a tratar y los procedimientos que se realizan en la Unidad de Cirugía Cardíaca de Dávila

Fecha de publicación: 20/07/22