Hace un par de semanas llegó a Chile la tan esperada vacuna contra el COVID-19, iniciando así el proceso de inoculación para grupos prioritarios. Por eso, junto con el Dr. Felipe Rivera, broncopulmonar de Clínica Dávila, despejamos algunas dudas que te permitirán conocer más detalles sobre este importante hito.

La vacuna disponible en nuestro país tras la aprobación del ISP, posee un sistema distinto al de las tradicionales, ya que no contiene el virus, sino que un ARN mensajero (ARNm) creado en laboratorio, que actúa como vehículo hacia las células para que generen la proteína Spike, que es la que permite al virus penetrar la célula humana y que, al ser reconocidas como extrañas por éstas, producen anticuerpos antivirales, que atacarán al virus cuando infecte.  Los estudios indican que la vacuna posee una efectividad del 95% y su forma de administración contempla dos dosis con una diferencia de 21 días entre ambas.

1-. Inmunidad:

Sin duda contar con la disponibilidad de la vacuna en nuestro país permitirá, en el mediano plazo, disminuir la propagación del virus y estimular la generación de defensas en el organismo. En este sentido, la autoridad ha indicado que se requiere que al menos un 80% de la población esté vacunada para lograr lo que se conoce como  “inmunidad colectiva”. “Aún no es posible determinar el período exacto de la duración de la inmunidad y puede que al igual como con la influenza, sea necesario vacunarse una vez al año”,  agrega el Dr. Rivera. 

2-. Reacciones adversas:

Las reacciones más frecuentes informadas tras la inoculación son dolor en el lugar de la inyección, fatiga, cefalea, dolor muscular y fiebre. “Estas reacciones no son exclusivas de la vacuna y, al igual que cualquier administración de medicamentos, podría tener efectos adversos. Sin embargo, sus ventajas superan por mucho estos efectos secundarios, por lo cual las personas no deben temer”,  indica el especialista.

3-. ¿Fin de la pandemia?

Al no contar con cifras sobre la duración de la protección de la vacuna, la autoridad ha sido enfática en indicar que las medidas de autocuidado se deben mantener. El uso de mascarilla, el lavado de manos frecuente, el distanciamiento físico y la buena ventilación de los sitios cerrados, reducen el riesgo de contagio y seguirán siendo necesarios. “Esta enfermedad nos enseñó algo que debimos haber sabido siempre, que es cuidarnos. Las medidas implementadas no debieran ser exclusivas del COVID-19, sino parte de nuestro día a día. El llamado es a mantenerlas y, en el caso de la mascarilla, utilizarla hasta que la autoridad indique lo contrario, aún estando vacunado”, afirma el Dr. Rivera.  

La primera etapa de vacunación se llevará a cabo durante el primer trimestre de 2021 para los grupos prioritarios, conformados por personal de la salud, personas desplegadas en la emergencia COVID-19, adultos mayores y enfermos crónicos. 

 

Más información:

https://www.minsal.cl/

https://www.gob.cl/yomevacuno/

 

Fecha de publicación: 14/01/2021