El Alzheimer es una enfermedad que genera un deterioro cognitivo importante y su síntoma inicial más común es la pérdida de memoria. Es la causa más frecuente de demencia en la población general, especialmente en personas mayores de 65 años.

¿Cómo saber si tengo Alzheimer?, ¿cuáles son sus síntomas y sus causas?, ¿existen tratamientos?, ¿tiene cura?, son algunas de las preguntas que realizaron nuestros pacientes y que fueron respondidas en un nuevo Dávila en Vivo, conversación en directo por Facebook Live.

Diagnóstico

Para comenzar el doctor Rafael Aránguiz, neurólogo de Clínica Dávila, explicó qué es el Alzheimer y aclaró la progresión que tiene la enfermedad.

“La enfermedad de Alzheimer es un síndrome clínico, es un conjunto de signos y síntomas que se produce por una enfermedad degenerativa, neurodegenerativa, es decir, que parte en forma progresiva en el cerebro”, indicó.

“La persona empieza a depender de otras para hacer algunas cosas, como salir a comprar, pagar cuentas, usar la tarjeta de crédito, etcétera, y posteriormente, aparte de la memoria, van afectando otras funciones cognitivas: el lenguaje y la capacidad de comprender, la conducta, la capacidad incluso de reconocer caras”, aclaró el especialista, respecto a la progresión de la enfermedad.

Causas y síntomas del Alzheimer

El médico especialista también se refirió a las causas de esta enfermedad, sosteniendo que “todavía no están completamente claras, pero se cree que se debe a que algunas proteínas que están dentro y fuera de las neuronas que van plegándose, van adquiriendo una formación un poco atípica y forman algo que se llaman placas neuríticas y ovillos neurofibrilares”.

En relación a los síntomas, el experto advierte que “se presenta como una enfermedad donde a las personas habitualmente después de los 60 años se les comienzan a olvidar algunas cosas que tienen que ver con algo que nosotros llamamos memoria episódica, y sobre todo memoria episódica reciente, es decir, se da el fenómeno de que conserva muy bien los recuerdos de la infancia, pero empiezan a olvidar las cosas que han ocurrido en los últimos meses, en los últimos años o desde que empezó la enfermedad en adelante”.

Depresión y Alzheimer: ¿Están relacionadas?

A pesar de que todavía está en discusión si la depresión es una condición que predispone el Alzheimer, sí es un síntoma premonitorio de la enfermedad.

El doctor Prudencio Lozano, neurólogo de Clínica Dávila, afirma que estas dos enfermedades “si pueden estar relacionadas, por pacientes con Alzheimer que tienen trastornos anímicos”, pero también aclara que “la depresión es de las enfermedades más frecuentes, entonces no es que todas las personas con depresión tienen que tener miedo de tener una enfermedad de Alzheimer o una demencia”.

El neurólogo Rafael Aránguiz, por su parte, agrega que “todavía está en discusión si es que la depresión sea o no un factor causal de la enfermedad Alzheimer. Si se sabe, hay algunos estudios que muestran que aquellos pacientes que han tenido episodios repetidos de depresión en el transcurso de su vida, efectivamente pueden tener más riesgo de deterioro cognitivo a largo plazo”.

Tipos de tratamiento

Existen 3 tipos de tratamientos para el Alzheimer. Uno es un tipo de tratamiento modificador de enfermedad, otro es sintomático y una tercera rama es un tratamiento preventivo.

El neurólogo de Clínica Dávila, Rafael Aránguiz, explica estos tipos de tratamiento. “El tratamiento preventivo es evitar, cuando yo no tengo la enfermedad, que más adelante me vaya a dar. El sintomático es una vez que ya estoy con la enfermedad, tratar de mejorar los síntomas parcialmente, y el modificador de enfermedad, es tratar de detener el curso de la enfermedad”, asegura.

“En estos momentos no existe ningún fármaco probado para detener la enfermedad, modificador de enfermedad, lo único que existe disponible son fármacos sintomáticos, es decir, logran mejorar algunos aspectos cognitivos y también conductuales, pero a la larga no detienen ni la velocidad con que avanza la enfermedad ni detienen el proceso patológico”, agrega el especialista.

Pérdida de memoria: ¿A quién acudir?

Si un paciente comienza a tener episodios de pérdida de memoria, olvida dónde dejó las llaves o dónde estaciona su vehículo, podría tratarse de Alzheimer.

El doctor Prudencio Lozano, neurólogo de Clínica Dávila, advierte sobre la importancia de visitar a un especialista en esos casos.

“Un caso así perfectamente podría ser Alzheimer, como también no serlo. Por eso probablemente el especialista más indicado sea el neurólogo, para que haga un diagnóstico diferencial del abanico de posibilidades que supone un trastorno de memoria como ese y descartar las causas reversibles y tratar de llegar a una causa lo más precisa posible”, asegura.

Por otra parte, el neurólogo Rafael Aránguiz, también advierte sobre un caso de ese tipo de  pérdida de memoria. “De todas maneras ese es un motivo para consultar pronto, porque eventos de la envergadura de dónde estacioné o dónde dejé el auto y que haya empezado a pasar los últimos uno o dos años, suena como un problema de memoria episódica y requiere consulta pronto”, sugiere.

La importancia de la familia, los cuidadores y el ambiente

¿Qué pasa con los familiares de una persona con Alzheimer? Los costos de tener en casa a un familiar con Alzheimer no son directos del paciente, puesto que no solo se trata de la compra de fármacos y tratamientos, sino que también son los costos de oportunidades y tiempos de los cuidadores.

El neurólogo Prudencio Lozano enfatiza en este tema, asegurando que “lo que significa la  modificación del entorno para manejar a un paciente con Alzheimer es bastante. Es muy importante considerar eso, porque uno piensa que se trata solamente de un paciente con alzheimer, pero eso supone ausentismo laboral y una serie de cosas del entorno, de la familia”.

Respecto a los cuidados, el experto aclara que no son solo farmacológicos, que  además “son los cuidados del entorno, no modificar mucho el ambiente. Muchas veces a pacientes para que se sientan mejor los cambian de pieza, pero eso hace que se desoriente más, se desadapte y que puede entrar en un círculo vicioso del trastorno del sueño, eso lleva a agitación, eso puede llevar a caídas y complicaciones”.

El doctor Rafael Aránguiz, neurólogo de Clínica Dávila, agrega al respecto que “el manejo de la enfermedad de Alzheimer y de cualquier demencia es multidisciplinario. No sirve solamente un médico ni dar un fármaco, se necesita el concurso de una terapeuta ocupacional, habitualmente los pacientes o los familiares necesitan asesorías de un asistente social, fonoaudiólogo, neuropsicólogo, psicólogo clínico”.

La demencia afecta indirectamente al llamado paciente cuidador. “Casi el 100% de los cuidadores en algún momento van a tener algo que se llama estrés del cuidador, que va a necesitar la intervención de un psicólogo clínico. Consideremos que en Chile los costos alternativos, todo lo que tiene que renunciar el cuidador es altísimo”, advierte el experto.

¿Existe cura para el Alzheimer?

“Cura no existe”, es enfático en responder el neurólogo Prudencio Lozano. “La enfermedad va a progresar y no tenemos como pararla”, asegura el experto, quien además se encargó de recalcar la importancia de prevenir la llegada de una demencia en relación a algunos factores.

“Lo recomendable para prevenir el advenimiento de una demencia, son los cuidados del factor cardiovascular, días de ejercicio, escolaridad, interacción social, todo eso es útil para la prevención. Son útiles una vez ya diagnosticada la enfermedad, pero no modifica la enfermedad, pero probablemente se detengan hitos de deterioro en el paciente”, agrega y aclara el especialista.