El Pectus Carinatum (PC), más conocido como “Pecho de paloma”, es una deformidad del tórax, en la que el esternón sobresale del pecho de manera anormal. Es 2 a 4 veces menos frecuente que el Pectus Excavatum, pero en estos últimos años su frecuencia ha aumentado. El desarrollo de esta malformación es progresivo, asociado a los períodos de crecimiento y mucho más frecuente en niños que en niñas. El Dr. Eduardo Leopold González, cirujano pediátrico de Clínica Dávila y especialista en cirugía de cuello, tórax y vía aérea pediátricas, agrega que los pacientes que padecen esta condición no suelen presentar síntomas cardiorrespiratorios, ya que no hay restricción ni problemas en los órganos internos del tórax.

Al no provocar un problema funcional es considerado un tema netamente estético, lo que no significa que no implique alteraciones psicosociales, las cuales también son tremendamente importantes. “Hay pacientes que presentan cuadros de depresión severa, algunos incluso con ideación suicida, por lo que es muy importante acompañarlos y ofrecerles un tratamiento”, agrega el Dr. Leopold. 

Causas del Pectus Carinatum o «Pecho de paloma»

La extensión y grado -leve o más grave- de esta malformación es muy variada y presenta una importante tendencia familiar. “Más del 50% de los pacientes tienen antecedentes familiares, ya sea tíos, abuelos o primos con Pectus. La enfermedad está en los cartílagos, en la conformación histológica del cartílago, que tiene una predisposición a crecer de forma desordenada. No es una enfermedad del esternón sino de los cartílagos, que unen las costillas con el esternón.”, afirma el especialista.

Síntomas del Pectus carinatum

La edad y grado de presentación de las anomalías de la caja torácica es muy variada. Hay pacientes en los que se hace evidente desde el período de lactancia. En estos pacientes se evidencia rápidamente una deformidad de la pared del tórax, pero hay niños en los que no se hace evidente hasta llegar a la preadolescencia y adolescencia (esto es lo más frecuente), que es la etapa de mayor crecimiento. Hay muchos niños que presentan esta malformación cuando se “pegan el estirón”, puesto que en esta etapa lógicamente también se desarrolla el tórax y eso hace más evidente la anomalía.

Lo general es que las consultas se hagan cuando los pacientes tienen entre 12 y 13 años. Cuenta el Dr. Leopold que muchos de ellos consultan a diferentes especialistas por un tratamiento y no encuentran ninguna solución, ya que hay muy pocos especialistas en Pectus, no solo en Santiago sino en todo Chile. “Los pacientes consultan y muchos les dicen “se le va a pasar cuando crezca”, lo cual es falso. Eso hace que lleguen a los 17 o 18 años con una malformación aún mayor y cuando las probabilidades de un tratamiento no quirúrgico no son posibles. El pectus puede mantenerse igual o aumentar, nunca disminuir.”

Detección del Pectus Carinatum

Algunos padres detectan el Pectus cuando los niños son pequeños, menos de 10 años, ya que los ayudan a bañarse o vestirse. Pero, en la adolescencia es más complejo evidenciarlo. “En el caso de los adolescentes detectamos que lo tienden a esconder, porque les da vergüenza y no se lo comunican a sus padres. El consejo es que, si notan cualquier cosa extraña en el tórax del niño, principalmente en el verano cuando por lo general exponen su pecho, consulten con el especialista, ya que entre más temprano se detecte es más fácil corregirlo.”, agrega el especialista.

Hay que tener en cuenta que estas deformidades no siempre son simétricas. La asimetría de un Pectus Carinatum determina que se aprecia externamente un aumento de volumen, sólo en un lado del tórax. A veces los padres asustados consultan porque creen que son tumores de la pared torácica. Se produce mucha alarma porque piensan que se produjo la alteración de forma súbita, pero en realidad no es que haya aparecido de un día a otro, es solo que no vieron su evolución.

Por eso, el Dr. Leopold recalca la importancia de tener una buena comunicación con los niños, porque habitualmente ellos sí se dan cuenta, lo notan, pero no dicen nada. Cuando se les pregunta de forma directa si habían notado el bulto en su pecho, por lo general responden que sí, pero no que no lo habían dicho porque creían que no era importante.

Tratamiento del Pectus Carinatum o “Pecho de paloma”

El tratamiento para el pectus carinatum, históricamente, ha consistido en una corrección quirúrgica, que implica una cirugía abierta en que se debe cortar el hueso y el esternón para alinearlo y fijarlo con unas placas. Esta intervención conlleva varios días de hospitalización para el paciente y se debe realizar en la adolescencia, debido a que los pacientes deben operarse en una talla lo más cercana posible a su talla adulta, para obtener buenos resultados.

Sin embargo, hoy en día el tratamiento de elección es de tipo ortopédico, con un compresor torácico, tipo corset, que mantiene en posición los cartílagos a medida que el paciente va creciendo. “Llega un minuto en que esos cartílagos se transforman en hueso, se calcifican. Esto sucede entre los 16 y 18 años, por lo que se empieza a disminuir el tratamiento con la compresión a medida que el hueso se pone en posición. Una vez eso ocurre y el paciente terminó de crecer, queda con su pecho plano”, cuenta el especialista.

Sin embargo, la indicación de este tratamiento dependerá de la edad del paciente y las características del pectus. “Entre más joven sea el paciente, más exitoso será el tratamiento ortopédico, esto ya que hay tórax muy flexibles que se pueden comprimir y otros que son extremadamente rígidos, que por mucho que se quiera no se puede. Y, entre más joven, hay mayor probabilidad de que sea flexible. Por eso, el llamado es a que consulten ante cualquier indicio, para así iniciar el tratamiento cuanto antes.”, enfatiza el Dr. Leopold.