¿Qué es un aneurisma cerebral?

Un aneurisma cerebral, también llamado aneurisma intracraneal, es una zona anormal o debilitada en un vaso sanguíneo cerebral que sobresale y se llena de sangre. Esta anormalidad arterial puede producir una presión excesiva sobre un nervio o tejido cerebral cercano. Sin embargo, lo más peligroso para la persona es que un aneurisma intracraneal se rompa, produciendo una hemorragia en el tejido cerebral adyacente. La gravedad de la rotura del aneurisma dependerá principalmente del tamaño del vaso sanguíneo involucrado. Algunos son muy pequeños y generan pocas secuelas y otros pueden provocar la muerte de la persona afectada.

¿Cómo se diagnostican los aneurismas cerebrales?

Los aneurismas cerebrales se pueden detectar antes que se rompan, con exámenes preventivos. Sin embargo, la mayoría de los aneurismas pasan desapercibidos hasta que aumentan mucho de tamaño o se rompen. Muchos aneurismas son encontrados por casualidad buscando otros hallazgos en la persona.

Los exámenes más utilizados para detectar un aneurisma cerebral o la rotura de éste son:

Angiografía: Utilizado para analizar las arterias o venas. Una angiografía intracerebral puede detectar el grado de estrechamiento u obstrucción de una arteria o vaso sanguíneo en el cerebro, la cabeza o el cuello, y puede identificar un aneurisma. Se aplica anestesia local al paciente y con la ayuda de un catéter se avanza hasta la zona afectada. Una pequeña cantidad de colorante de contraste se administra para realizar las tomas radiográficas e identificar los cambios.

Tomografía computarizada (TC): Este procedimiento, que es absolutamente indoloro para el paciente produce imágenes nítidas y más detalladas del flujo sanguíneo y las arterias cerebrales. A veces se utiliza liquido de contraste para clarificar la imagen.

Resonancia magnética (RM): La angiografía por resonancia magnética (ARM) produce imágenes más detalladas de vasos sanguíneos. Las imágenes pueden verse como tridimensionales o cortes transversales bidimensionales del cerebro y los vasos.

Tratamiento quirúrgico del aneurisma

El doctor Jorge Villacura, neurocirujano de Clínica Dávila señala: “hay dos formas de tratar los aneurismas y la elección depende de varios factores. Una, es hacerlo por la vía neuroquirúrgica clásica: abriendo el cráneo y poniendo un clip en el aneurisma. El clip queda de forma permanente en el paciente y evita el riesgo de sangrado posterior. La otra, es introducir un catéter por la arteria femoral, llegar hasta el aneurisma con el catéter y sellarlo con unos resortes especiales. Los espirales rellenan el aneurisma, lo bloquean de la circulación, y hacen que la sangre se coagule, lo que destruye efectivamente el aneurisma”, señala el facultativo.

El médico dice que la elección del tratamiento para un aneurisma intracraneal va a depender de las características del aneurisma y su locación. Existen algunos aneurismas que, por sus características, deben ser tratados con el clipado microvascular: “Evidentemente si el paciente pudiese elegir, la mayor parte de las personas preferiría no se sometidos a una cirugía en el cráneo y manejar el aneurisma con resortes por vía endovascular con catéter. Sin embargo, este procedimiento no tiene un buen resultado si la arteria comprometida es muy grande” finaliza Villacura.