El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que inicialmente se caracteriza por comprometer la memoria de los pacientes mayores de 60 años. Sin embargo, puede haber excepciones y podría afectar a pacientes más jóvenes.

Es por lo anterior que, el doctor Rafael Aránguiz, neurólogo de Clínica Dávila, entrega una serie de banderas rojas o señales de alerta a las que hay que prestar atención, ya que, podrían estar advirtiendo un potencial Alzheimer. Revisa el listado a continuación:

  • Cambio en las capacidades mentales: Si el paciente o uno de sus familiares comienza a notar que ha habido un cambio en sus funciones cognitivas en los últimos años, por ejemplo, si hay algo que siempre pudo hacer bien y de pronto comenzó a costar, es importante consultar.

 

  • Problemas por cambio en la rutina: El doctor Aránguiz asegura que, cuando el paciente tiene un leve problema de memoria, pero se pierde cuando cambian su entorno rutinario, ya sea por vacaciones o un viaje a otra ciudad, puede implicar algo más grave en camino, por lo que es un buen momento para consultar.

 

  • Problemas con otras funciones cognitivas: En ocasiones, a los problemas de memoria se agregan fallas a otras funciones cognitivas, como problemas para nombrar algunas cosas o reconocer lugares. Todo lo que signifique un síntoma neurológico extra a los problemas de memoria, es motivo de consulta, según explica el especialista.

 

  • Síntomas psiquiátricos: Que un paciente comience a tener síntomas psiquiátricos, de cualquier tipo de trastorno del ánimo, por primera vez en su vida, podría ser un indicador de Alzheimer. “Un paciente con problemas de memoria que además empezó por primera vez en su vida con una depresión a los 65 años, también es de cuidado, también es para ir a consultar, ya sea al psiquiatra o al neurólogo, puede ser cualquiera de los dos”, confiesa.

 

  • Problemas para el aprendizaje de nuevas tecnologías: El especialista explica que, si un paciente tiene problemas serios, no dificultades, sino que problemas serios para aprender y adaptarse a usar tecnologías modernas, a pesar de que lo intentan en reiteradas ocasiones, es motivo de consulta. “No es como el adulto mayor que lo ve una vez, lo deja y no quiere saber más, sino que intenta e intenta y no logra aprender algo que hace dos o tres años hubiera aprendido”, agrega el neurólogo.

 

  • Confusión con enfermedades médicas: Otra bandera roja para consultar con un médico es cuando el paciente comienza a confundirse cuando tiene enfermedades médicas. Se desorienta cuando tiene una infección urinaria, una neumonía, fiebre, entre otras; y a pesar de que pueden pasar o disminuir los síntomas una vez que se termina la enfermedad, es importante consultar.

 

Finalmente, el experto en Alzheimer asegura que siempre que una persona o un familiar, tenga dudas respecto a su rendimiento cognitivo es un buen momento para consultar, puesto que, lo que se está buscando en este momento es detectar a los pacientes en una etapa lo más temprana posible. “Es mejor dar de alta a un paciente porque se preocupó de más, a que se pase por alto y que llegue en etapa de demencia, aunque sea leve, porque no te preocupaste en el momento. Entonces, es mejor que consulten cuando esos síntomas producen al paciente una preocupación o una duda, aunque sea una duda subjetiva, aunque no la vea el resto, aunque le parezca solo a él”, concluye.