La preeclampsia es una enfermedad que se desarrolla durante el embarazo, posterior a la veintésima semana. Existen muchos riesgos de la preeclampsia en el hijo.

Esta patología, se caracteriza clínicamente por presentar hipertensión arterial asociada a la pérdida de proteínas por la orina, lo cual puede implicar riesgos en el hijo como en la madre.

Es una enfermedad de alto riesgo, porque es una de las principales causas de mortalidad materna y perinatal.

Actualmente, se desconoce el origen de esta patología. Lo que se sabe, es que está directamente relacionada con el desarrollo de la placenta y la respuesta que tiene la madre con ésta.

El doctor Javier Cardeaux, ginecólogo de Clínica Dávila, explica que “actualmente no existe tratamiento alguno para esta enfermedad. La única solución para esta patología es la interrupción del embarazo y la extracción de la placenta”.

Riesgos de la preeclampsia en el hijo

La preeclampsia afecta a la circulación de la sangre en la placenta, lo cual está relacionado a los riesgos para el feto. Estos son:

  • Restricción del crecimiento intrauterino: Al existir una disfuncion placentaria, el feto no recibe los suministros esenciales. Es por esto que no se desarrolla de manera adecuada, provocando un bajo crecimiento.
  • Parto prematuro: La necesidad expedita de la finalizacion del embarazo se puede traducir en la necesidad de un parto prematuro.
  • Mortalidad perinatal: Se estima que cerca de 500 mil niños en el mundo mueren a causa de complicaciones vinculadas a la preeclampsia.

Parto prematuro

En el nacimiento de niños prematuros existen ciertos problemas de salud que están asociados, como trastornos cardiovasculares, respiratorios y de termorregulación, debido a la inmadurez de algunos órganos.

Como norma general, entre antes sea el parto, mayores son los riesgos y las secuelas que podrá presentar el recién nacido.

“Se considera un niño prematuro cuando nace antes de las 37 semanas de gestación y en casos más severos, incluso antes de las 32 o 28 semanas”, explica el doctor.

Por otro lado, hay estudios que indican que los prematuros tienen mayor probabilidad de desarrollar enfermedades a largo plazo como diabetes, hipertensión o insuficiencia cardiaca.

Medidas de cuidado materno infantil

“Para evitar los riesgos tanto para la madre como para los niños, lo recomendable es la detección precoz. Existen ciertos factores que están asociados a la preeclampsia que las familias deben considerar, tales como embarazos primerizos, múltiples, en edades extremas (bajo los 20 y sobre los 35 años), enfermedades crónicas (como diabetes, hipertensión, entre otras)”, explica el doctor.

Además, si es que se tienen algunos síntomas, como dolor de cabeza, dolor abdominal, edemas, un pitido en el oído y subida de presión, se debe consultar al ginecólogo de manera pronta, para tomar las medidas adecuadas.

El diagnóstico oportuno permitirá disminuir los riesgos, porque se dará un manejo adecuado al embarazo.

Síntomas de la preeclampsia

Los síntomas de la preeclampsia son el aumento de la presión arterial, sobre los 140/90 mmHg, dolores de cabeza, pito en el oído, dolor abdominal y retención de líquido en las piernas o en la cara.

“Una vez que las sospechas sean claras de que la madre está presentando una preeclampsia, el médico tratante solicitará la realización de más exámenes para confirmar el diagnóstico. Además, con esto se analizará la severidad, para poder darle un manejo adecuado caso a caso”, explica el ginecólogo experto en embarazos de alto riesgo.

¿Cómo tratar la preeclampsia?

Una vez diagnosticada, en función de la severidad se recomendarán una serie de medidas paliativas y de manejo de los síntomas para lograr la mayor madurez posible del feto.

Si la preeclampsia es moderada, se intentará alcanzar entre las 37 o 38 semanas de gestación. Mientras que, si es severa, “el especialista evaluará la situación caso a caso, existiendo casos en que el término del embarazo se debe realizar de manera inmediata”, explica el doctor Caradeux.