Las infecciones de transmisión sexual (ITS) son un problema importante en nuestra sociedad y de no ser tratadas a tiempo pueden generar problemas en la salud sexual y reproductiva.

Además, pueden causar estigma y problemas psicológicos en las personas que las padecen.

Existen diferentes formas de prevenirlas y su tratamiento va a depender del tipo de infección que tenga el paciente.

“Las infecciones de transmisión sexual se transmiten de una persona a otra mediante contacto sexual, incluyendo sexo vaginal, anal y oral», explica el doctor Leonardo Chanqueo, infectólogo de Clínica Dávila.

Tipos de infecciones de transmisión sexual

Las ITS pueden ser de distinto tipo, según el microorganismo que las causa. Entre las más comunes están:

“Hay distintos tipos de infecciones de transmisión sexual, de acuerdo al microorganismo que las causa, por ejemplo, infecciones parasitarias (ladillas o piojos del pubis), virales como el herpes genital y el VIH o las bacterianas más clásicas, como la sífilis, la gonorrea o la clamidia”, esclarece el especialista.

Es importante destacar que no es posible contagiarse de una ITS a través de un contacto fortuito como abrazarse, darse la mano con alguien o sentarse en un baño público.

El experto, además, advierte que para contagiarse “no necesariamente debe existir sexo penetrativo, sino que cualquier tipo de práctica sexual donde exista contacto con piel, genitales, boca y/o recto. Incluso es posible que una persona tenga una infección de transmisión sexual y no tenga síntomas».

¿Cómo prevenir las ITS?

Nadie espera ni quiere infectarse vía transmisión sexual, por lo que es importante tomar conciencia y preocuparse de prevenir el contagio.

El especialista de Clínica Dávila, entrega algunas recomendaciones importantes para prevenir antes que lamentar:

  • La educación sexual es uno de los componentes más importantes de la prevención.
  • Evitar prácticas sexuales bajo el efecto de alcohol o drogas.
  • El uso correcto del condón con lubricante reduce en forma importante el riesgo de adquirir y contagiarse de una ITS.
  • Existen vacunas disponibles para prevenir infecciones como el virus del papiloma humano y el virus de la hepatitis B.
  • Promover la habilidad de reconocer una ITS y consultar a tiempo para realizar estudio de infecciones de transmisión sexual frente a la sospecha, incluyendo a la(s) pareja(s) sexual(es).

Para tener en cuenta, todo tipo de contacto sexual que implique fluidos corporales o que tenga contacto con genitales, puede poner en riesgo a la persona de contagiarse con una enfermedad de transmisión sexual.

Pese a que las infecciones de transmisión sexual son bastante comunes, existe poco conocimiento al respecto. Por lo mismo, es que muchas veces las personas afectadas sienten vergüenza tras contagiarse y no acuden de inmediato al doctor.