La precisión de un diagnóstico en la mayoría de los casos, está asociado a un procedimiento que permite corroborar la sospecha médica. Para el caso de las patologías que tienen relación con las arterias coronarias, el examen más indicado por los médicos es el escáner cardíaco.

El escáner cardíaco, también conocido como escáner coronario, es un examen que permite a los especialistas descartar con un 99% de certeza, que el paciente que se está sometiendo a dicho procedimiento, tiene ninguna enfermedad a las arterias coronarias.

El doctor Javier López, cardiólogo especialista en imágenes de Clínica Dávila, asegura que el escáner cardíaco aporta de tal manera que se pueden analizar las arterias del corazón de una forma no invasiva, puesto que, “las arterias coronarias, las que te dan sangre, no se pueden ver con ningún examen además del escáner coronario, salvo en pabellón con la coronariografía”, asegura.

Se trata de un examen que proporciona de forma perfecta una imagen de las arterias coronarias a un costo muy económico. “Por alguna razón rara, el escáner coronario en Chile es muy barato. La otra forma de descartar patologías en forma anatómica, viendo las arterias, es la coronariografía, pero tiene un costo económico muchísimo más elevado”, confiesa.

Asimismo, el cardiólogo de Clínica Dávila explica que es relevante considerar que el paciente debe cumplir con ciertas características clínicas para que no se exponga a un alto riesgo cardiovascular al realizarse el examen. Es por esto que, a quienes se puede solicitar el examen es a pacientes jóvenes que tengan un riesgo cardiovascular intermedio o intermedio bajo. “Los pacientes pueden ser sólo fumadores, sólo hipertensos o tener algún dolor en el pecho, con ellos va perfecto, ya que puedes confirmar que no tienen nada”, asegura el experto.

Por otro lado, las contraindicaciones para esta técnica son principalmente para pacientes que tengan alergia al medio de contraste (yodo) y problemas a los riñones o al hígado. Es por lo anterior, que los médicos a cargo deben tener precauciones y solicitar exámenes de laboratorio que demuestren que el paciente tiene bajo riesgo de complicaciones. “Siempre te piden que traigas un examen de sangre donde te diga cómo está la función de los riñones y si está muy alterada, no lo puedes hacer, necesitas autorización”, dice el doctor López.

¿En qué consiste el escáner cardíaco?

El escáner cardíaco es un examen rápido, en el que el paciente debe recostarse sobre una camilla. Una vez ahí, los especialistas inyectarán el medio de contraste que tiene la finalidad de destacar las áreas que el especialista busca destacar, lo que permite dar precisión al diagnóstico.