La glándula tiroides, situada justo debajo de la nuez de Adán, es una glándula que controla muchas de las actividades del cuerpo humano. Así, actúa regulando el metabolismo general del organismo y el grado de funcionalidad de otros sistemas.

Por ello, es importante un diagnóstico oportuno. Principalmente cuando la persona se da cuenta de un aumento en el volumen en la parte baja del cuello.

¿Cuándo extirpar la glándula tiroides?

Cuando el paciente advierte una anomalía en la glándula tiroides, es importante acudir de inmediato donde un especialista endocrinólogo. Él, por medio de un control médico y mediante una ecografía debe evaluar si se requiere la extirpación de la glándula.

En palabras del doctor Alexander Adauy, cirujano de cabeza y cuello de Clínica Dávila “la cirugía consiste en la extirpación de la glándula tiroides por una enfermedad que hace inviable mantenerla en el cuello. Ya sea por un cáncer o su sospecha, o por un hiperfuncionamiento que no responda a un tratamiento con medicamentos. Lo anterior se realiza por medio de una pequeña incisión en la parte baja del cuello”, indicó.

Una vez efectuada la cirugía, los pacientes dados de alta quedan con un medicamento diario de por vida que suplirá completamente la función de la glándula extirpada. Lo anterior, va a permitir a la persona llevar una vida totalmente normal.

Según explica el doctor Adauy , “los pacientes, por lo general, se van a sus casas 24 horas después de la operación. Luego deberán realizar un reposo relativo en casa por unos 15 días. Durante este tiempo, sólo deben evitar hacer esfuerzo físico”, señaló

¿Por qué elegir Clínica Dávila?

El equipo de cirugía de cabeza, cuello y maxilo-facial de Clínica Dávila está conformado por distintos especialistas certificados y con una amplia experiencia en el manejo y tratamiento de patologías a la glándula tiroides. 

Los resultados quirúrgicos y tasas de complicaciones demostrados son similares a las registradas en centros mundialmente reconocidos de Estados Unidos y Europa.

En relación al equipamiento, se utiliza tecnología quirúrgica y herramientas de última generación como, por ejemplo, tijeras de energía que permiten acortar los tiempos quirúrgicos. Disminuyendo así, la posibilidad de sangrados postoperatorios, y electro monitorización que disminuye la tasa de daño nervioso durante la cirugía.